CRÓNICA JORNADAS JEROME MINTZ

El pasado sábado la Casa de la Cultura de Benalup-Casas Viejas (nuevo Centro Cultural Jerome Mintz) acogió una jornada matinal con el fin de homenajear la vida y obra que llevó a cabo Jerome Mintz en nuestro municipio. El acto cumplió con las expectativas suscitadas y dejó grandes momentos para el recuerdo de los allí presentes.

En primera instancia, me gustaría felicitar a la organización del evento. Todo marchó con el ritmo habitual que este tipo de homenajes precisa y con la virtud de no convertirse en una ceremonia monótona y aburrida. Pese a la complejidad de los asuntos tratados en las diferentes charlas, cabe destacar la ausencia de discursos políticos ventajistas. El acto se centró en lo que el propio acto requería: ensalzar el legado antropológico de Jerome Mintz y premiar la labor desinteresada de personas que ayudaron al desaparecido estudioso.

Si se ojean diversos medios existe mucha información al respecto. Por ello, prefiero no ser muy repetitivo. Sólo quiero destacar algunos detalles para concluir. Me quedo con la intervención de alcaldesa que reconoció que se van a reactivar los trámites necesarios para que los lugares más emblemáticos de los Sucesos de Casas Viejas se consideren “Bien de Interés Cultural” (BIC).  Sobre los homenajeados con la gorra de Mintz subrayó la intervención de un familiar que manifestó que “su padre fue una persona muy consecuente con sus ideas y con el tiempo que le tocó vivir”. Por último, pongo el colofón a esta breve crónica con una de las frases de Carla Mintz (hija de Jerome Mintz): “Este edificio celebra la vida y no la muerte de mi padre”, en referencia al reciente cambio de denominación de la Casa de la Cultura.