IKER CASILLAS, DE GDANSK AL CIELO

El capitán de la Roja está de “dulce”. Iker Casillas ha sido objeto de numerosos halagos a lo largo de su carrera deportiva. “El santo”, “el iluminado” son algunos de los ejemplos más comunes. No obstante, me llamaron mucho la atención las que ha recibido estos últimos días por parte de sus “víctimas” croatas. El verdugo de la selección balcánica no ha pasado desapercibido. Para Rakitic, “Casillas es un crack, es una máquina”, comentaba el medio con su peculiar tono de voz, en el que se palpa con claridad la influencia de la zona en la que reside, Sevilla. Según el seleccionador croata, Slaven Bilic, “Casillas es un portero que da títulos”, y no le falta razón, ya que las intervenciones del guardameta fueron claves en la consecución de títulos recientes.

En estos días en los que se habla tanto del papel crítico de la prensa, del falso nueve y de la metodología “Del Bosque”, echo de menos elogios para el cancerbero de Móstoles. Se ensalza el juego de Silva e Iniesta, pero no alcanzan el lugar que merecen las paradas divinas de Casillas. Sin ir más lejos, basta el ejemplo de la UEFA, que tras el partido ante Croacia nombró como MVP a Iniesta. ¿Alguien duda de que Iker Casillas fue el mejor futbolista del partido? Yo, desde luego que no.